El arte de vivir y bien morir

Ahora que mi nieto Joel cumple 15 aurorales años; mis hijos y nietos se han reunido en mi casa para la celebración de su cumpleaños. Antes que se retiren, invito a Joel a pasar a mi biblioteca para conversar en intimidad.

Algo sorprendido y con su sonrisa de conejo vivaracho me mira. Le digo:

¿Recuerdas el cuento de Francisco Izquierdo Ríos que te regalé cuando aún eras niño? Diciéndote que mis cinco hijos habían leído ese cuento?

De inmediato, me respondió:

            Ah! Sí! El Bagrecito que surcó los ríos de la selva; en su travesía aprendió a sortear peligros y eludir acechanzas hasta que llegó al océano Atlántico mientras se iba haciendo adulto.

Claro, así fue. Ahora a mis 75 años y ya en el tramo final de mi vida quiero explicarte el Arte de vivir y bien morir; aunque no es fácil para mí expresarme con sencillez y amenidad porque no soy literato como Francisco Izquierdo Ríos, el autor del Bagrecito. Pero, lo intentaré conociendo tu afición al ajedrez. Afición que solo prendió en ti, después de haberle enseñado a mis cinco hijos y cinco nietos

Como tú sabes, en una lid ajedrecística se plantea una estrategia y se ejecutan tácticas y quien mantiene la iniciativa logra la victoria. Pero, en ese afán se cometen errores. Si el error se comete en la etapa de la apertura podría repararse en el medio juego; tan igual que un error cometido en la adolescencia, podría enmendarse en la edad adulta. Pero, un error en la vejez es irreparable como ocurre en los finales de la lid ajedrecística.

Como es lógico, los geniales ajedrecistas tienen una concepción de lo que es el ajedrez y la explicitan en las entrevistas. He aquí dos ejemplos.

 

¿Qué es el ajedrez?

  • Boris Spassky respondió:

El ajedrez es como la vida.

  • Robert Fisher respondió:

El ajedrez es la vida.

Para Spassky el ajedrez no era la vida o su vida. Spassky tenía una profesión y dedicaba mucho tiempo a otras aficiones como el atletismo, la natación, la música clásica rusa, la literatura, el tenis.... El ajedrez no lo encarceló, no lo aisló de la sociedad. Fue un ser humano y llegó a ser campeón mundial (1969-1972); aunque fue derrotado en el llamado “match del siglo”. Esa derrota fue, según Javier Cordero, porque tal vez le faltaba el 'instinto asesino' que poseía Fischer[1].

Para Fisher el ajedrez era toda la vida. Estaba encapsulado por el ajedrez y no tenía tiempo libre para otras actividades. No sabía bailar, enamorar, contar chistes; no fue a la universidad; sus conversaciones únicamente tenían como tema: el ajedrez. Desde niño fue un super especialista genial, llegó a ser una computadora de ajedrez y logró el campeonato mundial (1972-1975). Sin embargo, terminó su vida con alteraciones mentales.

En ese momento me interrumpe Joel para decirme:

Abuelito, el otro día escuché por radio Nacional la entrevista a un padre de familia que había acudido con su hijo de 18 años de edad, y tenista desde los cuatro. Todos los días entrenaba cuatro horas diarias, estaba con una dieta alimenticia energética y participaba en cuanto evento internacional había. Su padre le proporcionaba todos los recursos económicos que necesitaba para su preparación y viajes. Mencionó que la preparación de un tenista era cara. Indicó que las raquetas eran desechables en corto tiempo. La meta de ambos era lograr el máximo galardón mundial. En la entrevista habló mayormente el padre con mucho orgullo de su hijo y agregó que el gobierno no coopera en financiar a su hijo que estaba dando lauros al Perú.

Con una cariñosa palmada en la espalda lo felicité por la atinada interrupción al haber asociado a Fisher con el joven tenista. Aproveché para decirle:

El desarrollo personal de cualquier ser humano debe ser armónico, como el cuerpo humano; si no se origina un monstro con el crecimiento hipertrofiado de algún miembro u órgano y otro miembro pequeño y débil. Es como la economía de nuestro país: subdesarrollada.

Efectivamente, me dice Joel y vuelve a interrumpirme:

El joven tenistas del que te hablé, tiene en su cerebro una raqueta; que si logra el campeonato mundial, la raqueta va a ocupar todo su cerebro. Tal vez ¿el extraordinario futbolista Messi tiene en su cerebro una enorme pelota de futbol?

Mira Joel. Por tu manera de interrumpirme, aportando ilustraciones a lo que te estoy contando sobre la vida. Creo que ya podemos dialogar de igual a igual.

Bueno, como te seguía contando, esa desarmonía o deformación de la personalidad no solo ocurre en los deportistas sino también a cualquier hombre o mujer que se especializa profesionalmente y trabaja a dedicación exclusiva. Esto se originó cuando se empezó a producir bienes o servicios que se valoraban en el mercado mediante la división capitalista del trabajo, es decir, mediante el surgimiento de las profesiones u oficios.

Actualmente, en el mercado de trabajo tienen gran demanda los profesionales con alguna especialidad; por ejemplo, en la medicina, hay cirujanos que únicamente operan la mano; tal vez, en el futuro, se especializaran en operar el dedo. Ya hacen implantes en la mano de un dedo del pie.

Medio en broma y medio en serio se ironizaba a los médicos, diciendo que había unos especializados en el oído izquierdo y otros, en el derecho.

Quien advirtió tempranamente –en 1847- esa tendencia a la especialización en el trabajo de la naciente sociedad capitalista fue un notable economista y filósofo alemán de enorme barba: Carlos Marx, en su libro La miseria de la filosofía. A esos especialistas los llamó fachidioten. Los fachidioten son convertidos en celebridades y estimulados económicamente por las gigantescas empresas privadas.

Bobby Fisher tenía su cerebro convertido en un tablero de ajedrez con sus fichas; había asumido el ajedrez como la única razón de su existir. La figura de Bobby Fisher en el ajedrez mundial es inmortal. Cuando reproduzco sus partidas que han obtenido premios a la brillantez me ocasiona un gozo extraordinario. Sin embargo, la vida no solo es el ajedrez ni cualquier otra especialización profesional. Fisher, fuera del ajedrez era un idiota, era vulnerable. Aunque clamado y admirado por multitudes estaba encarcelado, acuartelado por el ajedrez. Es difícil imaginarse que un hombre genial, fuese, a la vez, también un idiota.

No solo la presente sociedad capitalista induce a la especialización; sino también al afán de lucro, la competitividad, el egoísmo y el consumismo. En el aspecto económico, da por resultado que el desempleo o la pobreza se extienda y la riqueza se concentre en los accionistas de las grandes empresas trasnacionales. En el aspecto, mental, las frustraciones de la población conducen a evadirse de la situación injusta y buscar refugio ilusorio en las enfermedades mentales, adición a las drogas, sectas religiosas o al suicidio. Esto conviene a los capitalistas porque no se les cuestiona ni están en peligro de un cambio que instaure la justicia social.

Bueno, Joel, creo que he hablado mucho; y para finalizar esta grata conversación, deseo que en tu vida llegues al océano Atlántico como el bagrecito y cuentes cómo es el mar a tus nietos. Ese es el arte de vivir para lograr una ancianidad saludable y saber morir con dignidad, pues, la ancianidad no se improvisa y la muerte es inevitable.

¡Ah! me estaba olvidando de entregarte tu obsequio; es un Cd. con una canción representativa de nuestra patria, El Cóndor pasa; y el libro El Alma matinal de mi querido José Carlos Mariátegui para que leas, Esquema de una interpretación de Chaplin.

Al despedirme, lo estrecho entre mis brazos, le acaricio su cabellera y le musito al oído: yo, como tú, también tuve 15 aurorales años.

FIN

Lima, Unidad Vecinal N°3, octubre del 2015.

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Fuentes:

El bagrecito, cuento de Francisco Izquierdo Ríos.

http://www.diarioinca.com/2009/08/el-bagrecico-francisco-izquierdo-rios.html

-El cóndor pasa

https://www.youtube.com/watch?v=7tIrD-QcqF4

4:04

-El alma matinal

http://www.archivochile.com/Ideas_Autores/mariategui_jc/s/Tomo3.pdf

 

Imágenes:

http://www.chessintranslation.com/2012/01/karpov-kramnik-and-kasparov-on-spassky/

http://www.theweekinchess.com/

http://www.clarin.com/especiales/genio-loco-quiso-jugar-perdio_0_1331867060.html

http://www.futboldecabeza.com/entrenamiento-psicologico-para-competir/

https://verbiclara.wordpress.com/2009/04/20/reflexiones-sobre-la-crisis-2-el-profeta-isaias-tambien-lo-habia-dicho-por-carlos-vidales/

[1]http://www.ajedrezdeataque.com/04%20Articulos/26%20Spassky/Spassky.htm