Número 15

18 roes y su controversial universo escultórico; mención aparte merece la inauguración del primer monumen- to escultórico al Himno Nacional en su centenario. López de Nava en lo que respecta a Emiliano Zapata, impulsó una interesante inflexión en el tradicional culto al héroe agrarista, al privilegiar por vez prime - ra la celebración de su natalicio. A partir del 7 de agosto de 1954, el evento se realizó con motivo de la inauguración de su efigie escultórica en el barrio de Tlaltenango. 12 Más tarde, el Zapata de Tlatenan - go, alternó en sus consumos cívicos su nacimiento y su muerte, hasta la expulsión de su efigie escultórica. La remodelación de la Glorieta Zapata ha dejado en lugar sombrío a Zapata, no por casualidad. Para las élites gobernantes Zapata es una figura incómoda por no decir indeseable. Del priísmo al panismo: políticas e ideologías escultóricas El denominado Jardín Pacheco situado en el centro histórico, nos obliga a diferenciar los avatares del jar - dín propiamente dicho del de la estatua del General Carlos Pacheco debida al escultor Gabriel Guerra. El jardín se inauguró el año de 1890 antecediendo en su existencia a su uso cívico. Tiempos del porfiriato y de la élite regional cuyo poder descansaba en los ingenios azucareros. La imagen de Pacheco formó parte del decorado urbano impulsado por el Gene- ral Jesús H. Preciado, gobernador del estado. A la muerte de Pacheco en 1891, otrora gobernador del Estado, fue declarado figura benemérita morelense y el año de 1895 su efigie escultórica signó al jardín porfiriano. 13 Una fotografía de 1897 nos presenta la efigie es - cultórica de Pacheco ubicada sobre un pedestal en 12  Tercer Informe de Gobierno del C. General de Bri - gada Rodolfo López de Nava Gobernador Institucio - nal del Estado de Morelos 1954-1955 , Cuernavaca, p.10 13  Valentín López González, Ob.cit ., pp.117-119 rituales y peregrinaciones propias al campo del cato - licismo popular morelense hacia su emergente ci- vismo popular. El coronel Perdomo promovió que en el interior de los edificios públicos se exhibiese una mitologizada y romántica serie de cuadros pictóricos sobre los orígenes nacionales y regionales debidos al pintor español Salvador Tarazona. A casi dos décadas de distancia, el general Rodol - fo López de Nava, gobernador de estado, en su infor - me de gobierno del periodo 1956-1957, nos presentó un cuadro similar, así nos dice: “El pueblo y las Autoridades rindieron culto cí - vico a los Héroes de nuestra Historia y con ve - neración y respeto fueron conmemoradas las fechas de recordación : el 5 de mayo; el 30 de Septiembre, 191 Aniversario del Natalicio del Generalísimo Don José María Morelos y Pavón; 20 de Noviembre: aniversario de la Revolución Mexicana; el 28 de Noviembre, Aniversario del Plan de Ayala; el 10 de Abril, XXXVIII Aniversario de la muerte del Paladín de la Revolución Agra - ria, General Emiliano Zapata, y la conmemora - ción del Centenario de la Constitución de 1957 y el Cuadragésimo de la de 1917, Declarándolo Año de la Constitución y del Pensamiento Libe - ral Mexicano.” 11 El General López de Nava durante su gestión gu - bernamental en Morelos se afirmó como el princi - pal impulsor del ritualismo cívico, acaso influenciado por su filiación castrense y sus deseos de redefinir el decorado urbano de Cuernavaca. López de Nava promovió la proliferación de un nacionalismo escul - tórico. Ello se expresó en el decorado urbano de Cuernavaca con la inauguración del Jardín de los Hé - 11  Quinto Informe de Gobierno del C. General de Brigada Rodolfo López de Nava Gobernador Consti - tucional del Estado de Morelos, 1956-195 7 , Cuerna - vaca, p.10

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