Número 21
49 desplazamientos de los turistas y los países hacia a dónde éstos se dirigen, principalmente. Afirma este autor la existencia de una asimetría en la distribución de los ingresos ligados al turismo, y las cifras que nos presenta nos hablan de un desequilibrio en algunas naciones, donde los ingresos provenientes del turis - mo llegan a representar el 90 por ciento del produc - to interno bruto, con el consecuente abandono de otro tipo de actividades, como pueden ser la agrícola e industrial, poniendo en tela de juicio, también, la calidad de los empleos que produce el turismo. Alicia Castellanos plantea también esta discusión, pero mientras que a Duterme le parece que se está ampliando el rango de los viajeros, a través del acce - so de las clases medias en algunos países, ya que en tiempos pasados los viajes solían ser privilegios de la aristocracia, para Alicia Castellanos, el actual panora - ma de desempleo y las condiciones de contratación que ha dejado el modelo neoliberal, han reducido el número de individuos que pudieran gozar de un pe - riodo vacacional y por ende, de la posibilidad de viajar. Para esta autora: Los contrastes entre ciudades, comunidades, regiones y sitios turísticos del Norte y del Sur están signados por una desigual distribución del poder y son profundas sus diferencias en diversos aspectos: las políticas turísticas de los estados y el rigor con el que se aplican las legislaciones que regulan el uso del sue - lo en playas, bosques y áreas protegidas, las relaciones entre turistas y anfitriones, las di - námicas identitarias y el lugar de los propios anfitriones en sus regiones, localidades y si - tios turísticos. (p. 269) El poder de las empresas trasnacionales dedi - cadas al turismo aparece como omnipresente y en complicidad con gobiernos federales y estatales, así como con los grupos de poder locales que violan normas establecidas con respecto al uso del suelo, a la conservación del medio ambiente y a las con - diciones laborales de los trabajadores nacionales. En esta misma línea de pensamiento, pero en otro sentido, en el trabajo De las antropologías mundo a la ecología política del turismo, Mauricio Genet, plantea que la investigación antropológica: “debe reconocer que las problemáticas locales están siendo definidas por el entrecruzamiento de una di - versidad de factores culturales de dominación y re - sistencia” (pp. 40-41) Para él es importante que se estudien tanto la realidad latinoamericana como la estadounidense y la europea y asumir la perspectiva Sur-Sur: …como recurso heurístico y sistemático para ligar al turismo con la identidad, la migra - ción, los mercados laborales, las políticas de conservación de la naturaleza, el territorio, la construcción de imaginarios y la disemina - ción de imágenes, símbolos y estilos de vida, entre otros tantos. (pp. 41-42) Considera que aún no se ha perfilado una pro - puesta de análisis que reconozca las particularidades dentro de la globalización, lo que conduce a la nece - sidad de plantear la transversalidad y horizontalidad en nuestras formas de investigar y hacer etnografía. El turismo debe ser entendido, plantea Genet, desde una dimensión global como una tendencia de desarrollo que pone en contacto a personas de di- versas procedencias y con diferentes mundos de vida y que dentro de sus perspectivas también disemi - na valores e imágenes inscritos en la modernidad y asentados en la concepción occidental sobre la per- sona y el individuo. (p.45) Con respecto a la perspectiva Norte-Sur , advier - te que para abordar la situación de interculturalidad en el fenómeno turístico, podría caerse en una sim - plificación si se le mira desde ese punto de vista, pues este tema va más allá de esta caracterización, pues la interculturalidad se desplaza, se mueve, legitima y produce efectos duraderos tanto en los visitantes como en los anfitriones.
RkJQdWJsaXNoZXIy MTA3MTQ=