Número 25

25 de su proyecto político, so - cial e ideológico, en efecto, fueron la participación de la ciudadanía, los programas sociales en salud, vivienda y la educación de los chilenos, desde la cuna hasta la vejez, a través de su Proyecto de educación para todos, Escue - la Nacional Unificada, ENU, que nunca viera la luz debido a la férrea oposición de las clases dominantes y la Iglesia que no quisieron perder sus privilegios ni espacios de dominación ideológica. Pero Allende era peligroso para el statu quo, no sólo por querer formar a un ciudadano consciente, capaz de construir su propia historia y saberse due - ño de un potencial libertario frente a la opresión política y económica de los más poderosos; tam - bién denunció con fuerza, valentía y claridad la in - tervención directa de Estados Unidos en el proceso democrático y social en Chile. También habló de la simiente del neoliberalismo, lo cual quedó plasma - do en su discurso en ONU, 1972, recibido con una ovación por los presentes. Estamos frente a un verdadero conflicto fron - tal entre las grandes corporaciones transnaciona - les y los Estados. Estos aparecen interferidos en sus decisiones fundamentales, políticas, económi - cas y militares por organizaciones globales que no dependen de ningún Estado y que en la suma de sus actividades no responden ni están fiscalizadas por ningún parlamento, por ninguna institución re - presentativa del interés colectivo. En una palabra, es toda la estructura política del mundo la que está siendo socavada… Es nuestra confianza en nosotros lo queincremente nuestra fe en los gran - des valores de la humanidad, en la certeza en que estos valores tendrán que prevalecer, no podrán ser destruidos. (Fragmento del discurso de Allende en la ONU, 1972) Reflexión final: Este 11 de septiembre es también una ocasión ade - cuada para dar gracias a México que hace 39 años, en esta hermosa tierra morelense, me acogió junto con mi familia, cuando la dictadura lo único que pro - metía era prisión, tortura o desaparecimiento, como castigo por haber participado en la operación de los programas sociales del gobierno popular y por haber organizado en el barrio una Junta de Abastecimien - to Popular (JAP) para vigilar que no hubiera mercado negro ni acaparamiento de productos básicos, estra - tegia de la derecha para poner al pueblo en contra del gobierno de la Unidad Popular. (En mi familia, igual que otras, hacíamos largas filas de madrugada y sólo conseguíamos unos pocos alimentos para los niños, los adultos pasábamos hambre) El exilio permitió que encontrara otra Patria, Mé - xico, a la cual amo profundamente y a ella dedico mi energía y desvelos. La epopeya de Salvador Allende y el pueblo chileno nos hizo universales. Las luchas por una vida digna, en cualquier punto del planeta, son también mías. **Periodista y militante social chilena, formó parte de la Juventud Obrera Católica (JOC) y del Mo - vimiento de Acción Popular Unitaria (MAPU) hasta el golpe militar de 1 973 en Chile. Reside desde 1 974 en Cuernavaca, Morelos, México, donde trabajó en CID - HAL y participó durante 18 años en el periódico Ma -

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