Número 37
27 afecta a otras partes del propio Kurdistán y países vecinos. Y la inversa: el enfoque destructivo de los actores en un país pue- de tener efectos negativos para la solución de la cuestión kurda en otros países. Como mencione: los kurdos a menudo son llama- dos la gente de la montaña o los hijos de fuego. El pueblo kurdo ha estado luchan- do desde tiempos inmemoriales contra la colonización y la conquista por potencias extranjeras. Ya se trate de los imperialistas y capitalistas actuales, o de los imperios del pasado, el paisaje agreste kurdo está prácticamente hecho para la resistencia. Por tanto, la resistencia se ha convertido en parte esencial de nuestra vida y cultura. La capacidad de imaginar, entre otras cosas, distingue a los seres humanos. Ima- ginar una forma alternativa de vida y de vivir es exactamente lo que Abdullah Öca- lan y otros miembros fundadores del Parti- do de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) comenzaron a hacer a finales de 1960 y principios de 1970. ¿Quién podría escapar del poder revolucionario y los efectos del movimiento estudiantil de 1968 que tiene lugar en varias partes del mundo? Öcalan y sus amigos fueron el subproducto de esta ola libertaria. Se imaginaban que podía ha- ber una vida en la que no habría espacio para la opresión, la explotación de las mu- jeres, la colonización y el chovinismo na- Fuente: www.cgtchiapas.org
RkJQdWJsaXNoZXIy MTA3MTQ=