Número 37

54 estado del sistema de salud pública? Y en otra escala, ¿tuvieron la culpa las compañías transnacionales, a las que sólo les interesa la comunidad en cuestión para apropiarse de su territorio para imponer ciertos megaproyectos cuestionables? ¿O el deterioro ecológico de la región (que in - cluye presas, una refinería, contaminación por agroquímicos, sobrepesca), que ha pro - piciado la escasez de pescado y camarón de los que tradicionalmente depende la comu- nidad, empujándola a una situación de ma- yor precariedad? ¿O los pocos inversionis - tas que se han beneficiado de este deterioro ecológico, mediante la concentración de la tierra en cada vez menos manos? ¿Tuvimos la culpa todos, por no ha- ber sido capaces aún de generar un mo- vimiento social con la fuerza suficiente para obligar al Estado a establecer un sistema de salud verdaderamente uni- versal, no mercantilizado, gratuito, con perspectiva realmente intercultural, con suficientes recursos, respetuoso de los derechos de pacientes y trabajado- res? ¿Por carecer de un Estado que haga su prioridad la Salud y no las ganancias privadas? Claro, sabemos que el sentimiento de culpa no transforma nada. Lo que aquí importa es la certeza de una muerte infan- til evitable. Y esa certeza ha de asumirse como una fuerza que derive efectivamente en transformaciones. Importa dilucidar en toda muerte evitable el juego de factores determinantes diversos, cuya sinergia co- bra vidas, cercena futuros y demanda ac- ciones concretas. La actitud de Yaneli es resignada. Cul- pa a Dios pero acepta sus designios. Sin embargo, yo no veo fuerzas divinas en esta tragedia, sólo fuerzas sociales. Y aunque dicen que estudiar medicina es de lo más complejo, la fisiopatología de la distocia de cabeza en el parto en presentación pélvica es mucho menos complicada que la sociofi - siopatología en la muerte de este niño, que no llegó a tener nombre. Y mientras no seamos capaces de organizarnos y tomar las riendas de este país, tragedias como esta seguirán ocurriendo día con día, con- denadas al olvido. Referencias • Breilh J. “La determinación social de la salud como herramienta de transfor- mación hacia una nueva salud pública (salud colectiva)”, Revista de la Facul- tad Nacional de Salud Pública, 2013; 31(supl 1): S13-S27. • Hersch-Martínez, P. “Epidemiología Sociocultural: una perspectiva nece- saria”, Salud Pública de México, 2013; Vol. 55(5): 512-518. • Observatorio de Mortalidad Materna en México, www.omm.org.mx Ilustración de Pawel Kuczynski (www.pawelkuczynski.com)

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