Número 50

18 Escribimos marcados por las experiencias de los terremotos vividos y por nuestras ideas entre Perú y México, sin olvidarnos de que ambos países son parte del tejido mundial de relaciones. Esos eventos dejaron huellas emocionales, ideológicas y míticas más o menos profundas en las élites y en las clases subalternas. El terremoto suscita fundados temores y re- flexiones. Representa algo más que un desastre natural por involucrar a la población afectada y a sus organismos gubernamentales, así como servir de fundamento para las políticas de prevención y asistencia. La medida preventiva más propagandizada en México se le conoce como Alerta Sísmica, la cual ofrece una señal sonora 50 segundos previos al clí - max del terremoto, aunque dista de alcanzar a todo el territorio nacional. La segunda, se apoya en los simulacros de evacuación que se realizan en dependencias estatales, escuelas y universidades. Evoco, pienso y escribo en vísperas de conmemorarse el 22 aniversario del terremoto acaecido en la ciudad de México a las 7:19 de la mañana, un jueves 19 de septiembre de 1985. Su reactualización en nuestra agenda se inspira, qué duda cabe, en haber sido sacudido como todos, por las ondas expansivas del terremoto de este reciente 7 de septiembre. Pasaremos revista sumaria, al panorama globalizado de los desastres naturales. Luego nos desplazaremos a través de dos tiempos republicanos Imagen 1. Rescate popular de las víctimas en Haití. http://www.viajeslibres.com

RkJQdWJsaXNoZXIy MTA3MTQ=