Número 54

28 ocurrió estirar la mano y resultó que era un tubo del mismo puesto. Me fui riendo hacia mi casa 9 . La capacidad para percibir los objetos sin recu- rrir necesariamente al tacto de las manos parece estar basada en el principio de ecolocalización. La presencia de los objetos se revela mediante modulaciones del sonido que rebotan sobre un obstáculo y vuelven hacia los oídos, aunque no son exclusivamente los oídos los que están involucrados en este proceso pues es la presión que se percibe en todo el cuerpo 10 . Tal sensación multimodal que no es puramente el tacto, el eco o el movimiento, sino una conjunción de todos ellos hace esta forma de experiencia sensorial difícil de entender para quienes consideramos el mundo esencialmente visual. Ensamblar el mundo con las manos y los pies puede ser una tarea minuciosa, a un ritmo al que no está acostumbrada la vista. El sentido del tacto que reside en todo el cuerpo que es muy sensible, tanto que los inquietantes destellos de calor emitidos por el sol pueden orientar a la persona en su andar. Hugo nos cuenta su experiencia: Mis manos y mis pies son mi tacto. El tacto de mis pies lo tengo muy afinado. Yo te puedo decir cómo es el piso, es decir, yo no lo veo ni con la poca luz que percibo pero por medio de mi tacto sé cómo es, si tiene grietas, bordes, topes, piedras, tierra, yo lo identifico con mis pies y sé por dónde voy. He usado muy poco el bastón, siempre usé mis pies. Durante 48 años no usé bastón, y mis pies me guiaron siempre, claro iba más lento. Por ejem- plo, en el metro mis pies y mi bastón me ayudan a sentir las texturas del piso. Se siente la textura de la pintura de la línea amarilla que está como límite en el andén, y después de la línea amarilla el piso tiene otra textura, se siente rasposo y como dos pasos antes de llegar a ella el pie se atora. Estos detalles evitan que caiga a las vías del metro, las 9 Plática con Monserrat Valdez Sánchez, Nezahualcóyotl, Estado de México, 9 de enero de 2015. 10 Los casos más conocidos son los de los estadounidenses: Daniel Kish, persona ciega que ha conseguido el certificado de guía de otra persona ciega, y Ben Underwood, considerado como el mejor “ecolocador” del mundo hasta su fallecimiento en el 2009. Se pueden ver videos de Ben y de su ecolocalización en la página web www.benunderwood.com texturas me indican en dónde estoy. En todas par- tes hay texturas no sólo en la ropa que usamos 11 . Al desplazarse alrededor del quiosco morisco, Hugo sabe dónde se encuentra al sentir el calor del sol en alguna parte de su rostro y cuerpo, la luz del sol lo guía en su desplazamiento. Depende si le da de frente, en la espalda, a su derecha o iz- quierda, él localiza con precisión la temperatura de los espacios logrando nociones de espacio y lugar 12 . Simplemente los rayos de luz no le sig- nifican mucho en cuanto estos no son totalmente perceptibles a sus ojos, en cambio, sí le propor- cionan elementos que siente con el resto de su cuerpo para construir detalles del mundo. La luz emitida por el sol no sólo es útil para aquellos que ven sino que también afecta significativamente en otros niveles a todo ser sensible. 11 Plática con Hugo Sedano Hernández, Ciudad de México, 12 de febrero de 2015. 12 Caminata que realicé con ojos vendados en compañía de Hugo en el quiosco morisco, Ciudad de México, marzo 2013.

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