Número 54
38 Las autoras de este notable trabajo hacen ver que no es casualidad el que se pueda observar la señal, ya que cada bloque cuadrado puede tener entre cinco o seis caras y se dejó a la vista el que presenta la marca para indicar a otro operario el montaje como testimonio del sistema constructi- vo y favorecer su correcta colocación (imágenes 6, 7 y 8). A partir de la metodología implementada, en- contraron dos marcas diferentes en un mismo bloque: de la primera informan que era la iden- tificación individual o del grupo al que pertene- cían para efectos de pago y de la segunda forma correspondían a la manera en que estos bloques cortados debían ser montados. Por lo tanto, una primera marca es la que dejaron en una primera etapa los picapedreros; la otra marca la interpre- tan como del cantero que estaba trabajando en equipo o de uno de ellos que aprobaba el trabajo del otro (imágenes 9 y 10). Imagen 4. Llave que representa al clavero del rey. Ermita de Santiago de Agüero, Huesca. Tomada de A. García Omedes, http://www.romanicoaragones. com/31-Sotonera/990414-AgueroSantiago092.htm Imagen 5. La marca del lado derecho, abajo, es seme- jante a la conocida como llave de Santiago de Agüe- ro, anagrama de Petrus. También en este mismo arco toral de la catedral de Santiago de Compostela está representada la letra B, la P, la ψ invertida y esquema- tizada. Foto: Susana Gómez
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