Número 54
Y a había tenido conocimiento sobre la participación del Instituto Na- cional de Antropología e Historia durante los sismos de 1985. Si bien en algunas conversaciones con los compañeros de mi centro de trabajo -la Direc- ción de Etnología y Antropología Social- se había tocado el tema, esa experiencia compartida ad- 1 Agradezco a Mario García haberme proporcionado algunos de los docu- mentos generados por la Comisión Interdisciplinaria que se formó en el INAH para investigar el impacto de los sismos de 1985. Tanto a él como a Ma. Ele- na Morales, Javier Guerrero y Teresa Mora les agradezco especialmente por compartir su experiencia durante ese proceso y hacerme partícipe de ese momento de la historia de la DEAS y del Instituto. Estoy convencida de que analizar esos documentos y, sobre todo, conocer de viva voz esa experiencia pueden sentar bases para pensar en posibilidades y construir alternativas frente a acontecimientos como los sismos y otros desastres. quirió especial relevancia a partir de los sismos de 2017. El interés por indagar en ese momento de la historia de nuestra Institución surgió a par- tir de mi participación como voluntaria y des- pués como parte de las brigadas formadas por la Coordinación Nacional de Antropología, y se acrecentó cuando tuve la oportunidad de cono- cer algunos de los documentos generados por la Comisión Interdisciplinaria que se formó en el Instituto durante los terremotos de 1985. 2 2 Junto con Laura Corona y Leonardo Vega conformamos la Brigada Ciudad de México. Nuestra labor se concentró en San Gregorio Atlapulco, Xochimil- co, una de las partes más afectadas de la ciudad por el sismo de 2017. De nuestra participación en las brigadas se derivó el documento “San Gregorio Atlapulco, Xochimilco, después del 19 de septiembre 2017. Apuntes inicia- les” que se encuentra en proceso de publicación en Rutas de Campo. 9
RkJQdWJsaXNoZXIy MTA3MTQ=